¿Cerré la llave del gas?... Al igual que los músculos, las habilidades cognitivas pueden ejercitarse para evitar el normal deterioro asociado al paso de los años. Los olvidos cotidianos parecen inevitables y muchas personas se resignan a padecerlos. Pero estudios recientes demuestran que la pérdida de la memoria no forma parte del normal envejecimiento. ¿Se puede mantener la memoria en buen estado durante toda la vida? Sí, se puede entrenar la mente para mantenerla en forma.
PRESENTACIÓN
¡Hola a todos!
Voy a empezar presentándome y explicando brevemente las motivaciones y objetivos de este blog.
En primer lugar, me llamo Celia y este espacio nace como una actividad voluntaria dentro de la asignatura "Sociedad del conocimiento, Tecnología y educación", del grado en Educación Social. Para aquellos ajenos a este proyecto,la asignatura comienza abordando temas como la alfabetización a través del tiempo y sus nuevas implicaciones, entre ellas, la necesidad de conocimiento de las nuevas tecnologías como soporte clave de comunicación hoy día. Por ello, a los futuros educadores, se nos exige desarrollar habilidades en estos campos. Esta es la primera motivación de este blog.
Para abordar la segunda, es decir, la dedicación de este espacio a la “memoria” he de implicar mis vivencias y experiencias en este tema. Todoempezó cuando mi abuelo empezó a perder las llaves, las gafas y a olvidarse de que tenía que ir a algún lado. Esto me empezó a preocupar y decidí buscar la manera de ayudarlo. Empecé a buscar información por todos los sitios sobre programas de entrenamiento cognitivo, sobre juegos, lecturas y pruebas de ingenio que le dieron excelentes resultados. Ya no pierde las cosas y se organiza mejor. Por lo que he pensado en crear este Taller de Memoria, que creo que podría incluirse dentro del ramo de la Educación no formal.
Considero que con vuestras aportaciones y participación este blog podría ayudar a otras personas con el mismo problema "LA MEMORIA". Gracias a todos anticipadas por vuestra ayuda.
“Vaya, pues no me acuerdo y eso que lo he estudiado”, “ah, pues eso yo lo estudié en su momento pero ya no me acuerdo”, “estoy seguro de que me leí ese libro pero ahora mismo no me acuerdo ni del título ni del autor”, “claro que sí, la película en la que actúa este actor tan famoso que tiene los dientes muy blancos y una cara que da miedo. Pero… no me acuerdo cómo se llama”, … ¿Te ves alguna vez en una situación parecida a las anteriores? Seguramente no puedes recordar todo lo que has estudiado, especialmente unos años después de haberlo hecho. Lo mismo te puede ocurrir con las películas y los libros. No hay nada malo en ello. A todo el mundo le pasa. Pero hay ocasiones en las que no te gusta verte así. Quieres acordarte del dato. Te da rabia que no sea así.
Por un lado tenemos el efecto “lo tengo en la punta de la lengua“ y por otro simplemente tienes el dato guardado pero no consigues extraerlo de tu memoria porque no hay una forma directa de localizarlo.
Sin Métodos para Memorizar, es lo que ocurre
Cuando no utilizas ningún Sistema de Memoria para almacenar la información que quieres recordar en un momento posterior, como por ejemplo en un examen, lo que ocurre es que estás limitando tus capacidades, estás utilizando una parte muy pequeñita de tu potencial.
En general me estoy refiriendo a un tipo de prueba en la que vas a tener que responder sobre lo que has estudiado previamente y además la cantidad de información es algo más grande que, por ejemplo, una lista de la compra. Para ésta última siempre puedes utilizar un sistema de memoria si quieres recordarla sin necesidad de apuntar en una hoja, pero incluso si lo utilizas, tampoco necesitas recordar la lista toda la vida. Por ejemplo, con el Método de Loci, el cual consiste en recordar un recorrido que te resulte familiar y asociar los alimentos a comprar a hitos, marcas dentro de tu recorrido. Puedes memorizar la lista de cosas que quieres comprar en una tienda de comida. Pero no necesitas recordar toda la vida esa lista, es más, no te interesa. Cada cierto tiempo vas a comprar comida a la tienda, pero no siempre es lo mismo. Por tanto, aunque utilices el Método de Loci, no necesitas un recorrido distinto cada vez, sino que deshechas la lista anterior y cada vez que vas a memorizar una lista de cosas a comprar, utilizas el mismo recorrido, con los mismos hitos. Es decir, te olvidas de la lista anterior porque ya no la necesitas más y la reemplazas por la nueva.
Ejemplo
Lo vas a ver muy claro con el siguiente ejemplo: Imagina que tu memoria es un almacén de muebles muy grande. Tiene 10 pisos y 100 habitaciones por piso. Resulta que sin utilizar Métodos para Memorizar, sólo abarcas una parte muy pequeñita del almacén. Según te va haciendo falta, vas llenando habitaciones con las cosas que vas a necesitar después. Empiezas por la número 5 de la primera planta, luego te vas a la número 87 de la novena planta y así vas rellenando habitaciones. Utilizas las habitaciones según y donde te venga bien. No llevas un control de dónde dejas las cosas. Pero tampoco hay mucho problema porque cuando necesitas algo, siempre sueles estar muy cerca de la habitación y no te resulta difícil encontrarla (esto es lo que ocurre cuando memorizas las cosas al final, poco antes del examen). Cuando llega el momento, coges lo que necesitas y luego lo dejas atrás. Cuando necesitas almacenar algo nuevo, te coges otra habitación y dejas ahí las cosas (estudias para otro examen). Nunca te preocupas por llevar la cuenta de las habitaciones usadas o lo que hay en ellas.
¿Qué ocurre cuando necesitas algo que dejaste en algún sitio pero no te acuerdas de dónde? Pues que lo pasas un poco mal buscando la habitación. Y en algunos casos acabas utilizando otra para guardar artículos que ya estaban guardados en otro sitio pero que no recuerdas bien dónde.
Cuando utilizas Métodos para Memorizar, combinados entre sí y con ayudas gráficas como los Mapas Mentales, Conceptuales o Diagramas de Árbol para prepararte para los exámenes y sigues un método consistente de repaso, todo lo pones en el almacén casi infinito que es tu mente. Y encuentras muchos beneficios en el camino:
Creas una estructura, que te permite guardar la ubicación exacta en la que dejas las cosas, de cada concepto que memorizas
La información la tienes disponible en un instante. Sólo tienes que echarle un vistazo al plano y ¡zas! aparece no sólo el piso y la habitación sino también la parte de la habitación y la balda en la que se encuentra el objeto
Ahorras espacio porque una vez que dejas la información en un sitio, no tienes que volver a ponerla en otro. No se te olvida, por lo que no tienes que volver a estudiarla (almacenarla)
Ahorras tiempo porque apenas tardas en encontrar la información, cada cosa tiene su sitio y es muy fácil encontrarlo
Tu almacén va creciendo con el tiempo o, en realidad, vas creando nuevas plantas y nuevas habitaciones en el almacén, según te va haciendo falta.
En definitiva
Si quieres recordar en unos años lo que estás estudiando ahora (para tu trabajo, por placer, porque no quieres perderlo, …), utiliza técnicas de memorización (Métodos para Memorizar) y sírvete de ayudas gráficas (Mapas Mentales o Conceptuales, Diagramas de Árbol, …). Pruébalo y sorpréndete. La primera impresión es la sorpresa, no esperabas que pudiese ser cierto. Luego verás que tu mente no tiene límites. No se trata de un almacén de 100 plantas, se trata de un rascacielos del que no ves el último piso.
Información recogida de la página elartedelamemoria.org.
Toda la informacion es perfecta, buenos tips para mi memoria. Excelente todo muy bien. Felicidades
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