La pérdida de memoria prospectiva a corto plazo en los adolescentes es un efecto indeseable más del consumo de alcohol, según ha demostrado un estudio inglés.
PÉRDIDAS DE MEMORIA EN LOS JÓVENES
- Las consultas, que no suelen hacerse a tiempo, crecieron un 30%. La preocupación de los especialistas es que muy pocos registran que se olvidan actividades o que les cuesta concentrarse porque están agotados o muy presionados.
- La vorágine del mundo actual, las presiones en el hogar, la necesidad de estudiar y trabajar al mismo tiempo, la falta de empleo o las dificultades para sostenerse solos, entre otras preocupaciones, siembran un nuevo enemigo: la falta de memoria.Ocurre entre los jóvenes de 20 y 30 años cada vez con más frecuencia, alertan los expertos.
- Aunque las estadísticas en el país son casi inexistentes, los especialistas aseguran que hoy el estrés se instala antes de llegar a la adultez.Las consultas de jóvenes de entre 18 y 30 años crecieron un 30%. Y siguen en aumento. Es muy común que se presenten pacientes jóvenes, ejecutivos o estudiantes universitarios con dificultades para memorizar, que postergan tareas o, directamente, evitan dificultades. El hipocampo, región fundamental para el correcto funcionamiento de la memoria, es sumamente sensible a los efectos del estrés. Está asociado con la capacidad de lograr memoria y adquirir nueva información. El estrés afecta la capacidad de aprender cosas nuevas.La primera falla en la memoria “es que como no se puede sostener la atención, hay cosas que se vuelven no memorizables. Es como decir 'tengo el disco rígido lleno'.
- Estar alerta a tantos estímulos, hace que la atención sea más limitada y, por ende, la memoria más débil.La juventud es un tesoro que hay que cuidar. Por eso, ante los primeros síntomas, hay que consultar con el médico. Pero lamentablemente, la gente nota que vive estresada cuando ya lleva mucho tiempo sufriendo. El estrés puede dejar secuelas físicas y psíquicas y cuanto más tardía es la consulta, más difícil es revertir el cuadro.